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La banca abierta ha revolucionado la forma de compartir los datos financieros, abriendo un mundo de posibilidades para usted y sus clientes.
Esta innovación financiera ya ha alcanzado grandes cifras: a escala mundial, se prevé que los volúmenes crezcan de $53 millones en 2023 a $334.000 millones en 2027.
Pero, ¿qué es la banca abierta y cómo puede beneficiar a su empresa? Echemos un vistazo...
El objetivo de la banca abierta es facilitar el intercambio de datos entre terceros, mejorando la experiencia de las tareas financieras, como pagos, transacciones, inversiones, etc. Es un sistema que permite a los bancos y otras instituciones financieras compartir de forma segura la información financiera de un cliente con otros proveedores financieros, que de otro modo se guardaría internamente.
Pero, ¿qué significa esto para todos los afectados?
Tanto si se trata de un banco como de un servicio de procesamiento de pagos, la entidad financiera puede compartir fácilmente los datos de sus clientes con las empresas, ofreciendo un servicio más fluido y de mayor confianza.
Las empresas pueden beneficiarse realmente de la banca abierta. Con un mayor acceso a los datos de los clientes, pueden promocionar su negocio de forma más eficaz, así como automatizar los pagos instantáneos para una experiencia fluida.
La banca abierta permite al cliente controlar sus datos financieros. Puede elegir quién tiene permiso para acceder a ellos y le permite gestionar todas sus cuentas en un solo lugar, lo que le proporciona una mejor gestión financiera, recomendaciones personalizadas y productos innovadores. Es como tener un centro digital de sus finanzas para tomar decisiones financieras más inteligentes.
Imagine tener varias cuentas en distintos bancos y servicios financieros. En el pasado, era un poco engorroso llevar la cuenta de todos tus saldos, transacciones y gastos. La banca abierta cambia las reglas del juego.
Es hora de ponerse un poco más técnicos. La banca abierta es posible gracias a las interfaces de programación de aplicaciones (API), que son esencialmente una pasarela entre diferentes programas informáticos para ayudarles a comunicarse entre sí.
La API de banca abierta es básicamente un conjunto de instrucciones sobre cómo terceros pueden acceder a los datos de una persona, como el nombre de la cuenta y el historial de transacciones. El cliente no necesita rellenar largos formularios; el sitio web de terceros podrá acceder directamente a los datos.
Corresponde a la entidad financiera incorporar la banca abierta a su oferta para que sus comerciantes y, en última instancia, los clientes de los comerciantes, puedan beneficiarse de ella.
Existen múltiples escenarios en los que la banca abierta puede utilizarse en beneficio de todos los implicados. Veamos cómo utilizar la banca abierta.
Dado que cada vez más empresas y servicios tienen acceso a la información financiera de las personas, es totalmente válido preguntarse si la banca abierta es segura. La respuesta es sí.
Al igual que cualquier otro tipo de servicio financiero digital, la banca abierta da prioridad al mantenimiento de la seguridad de la información financiera.
En primer lugar, el intercambio de datos sólo puede tener lugar con el permiso del cliente. Este tiene pleno control sobre qué aplicaciones o servicios de terceros accederán a sus datos y puede revocarlo en cualquier momento.
En segundo lugar, el acceso a las API está salvaguardado por estrictas normas del sector bancario, como la PSD2. Y puesto que la banca abierta se basa en API para transmitir los datos, la información está protegida de la misma manera que lo está la banca online. Por lo tanto, hay normas de banca abierta que los bancos y las instituciones financieras deben seguir, incluyendo el cifrado y la protocolos de autenticaciónpara mantener la confidencialidad de la información.
Por supuesto, siempre es importante elegir aplicaciones o plataformas fiables y de buena reputación cuando se utiliza la banca abierta. Pero cuando se utiliza un servicio de confianza, la banca abierta está diseñada pensando en tu seguridad.
La banca abierta y las finanzas abiertas pueden sonar parecidas, pero tienen algunas diferencias. La banca abierta consiste en compartir datos financieros entre bancos y otras empresas de confianza. Permite conectar las cuentas bancarias a otros servicios, como apps de presupuestos o plataformas de préstamos, para ayudarles a gestionar sus finanzas más fácilmente.
Ahora, las finanzas abiertas van un paso más allá. No se limita a los bancos: abarca la puesta en común de datos de diversos sectores financieros, como compañías de seguros, plataformas de inversión y otros. Es como tener una visión completa a vista de pájaro de la vida financiera de alguien, en lugar de solo un vistazo.
En términos más sencillos, mientras que la banca abierta se centra en el intercambio de datos relacionados con los bancos, las finanzas abiertas amplían ese alcance para incluir una gama más amplia de información financiera con el fin de obtener una imagen financiera más completa.
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