Los códigos QR se han hecho increíblemente populares últimamente, sobre todo a la hora de realizar pagos en el sector de la hostelería desde la pandemia de Covid-19. Pero antes de eso, no tenían el mismo nivel de popularidad que otras formas de pago.
Cuando miramos a otros opciones de pago sin contacto como NFC o los códigos de barras, los códigos QR no tenían mucha presencia en el mercado occidental. La gente los veía sobre todo como una forma de escanear y obtener información, más que como un facilitador de pagos.
Sin embargo, las cosas están cambiando últimamente. Con la creciente adopción de los códigos QR, parece que por fin están consolidando su posición como método de pago global.
¿Qué son exactamente los códigos QR? Pues bien, son códigos digitales que almacenan información. Al principio, se utilizaban para rastrear la tecnología de las herramientas, pero ahora han evolucionado y se utilizan para diversos fines en los servicios comerciales, como realizar pagos y almacenar soportes.
El aumento del uso de códigos QR se ha visto impulsado principalmente por su implantación en los pagos a comerciantes. Un buen ejemplo es el uso popular de códigos QR en aplicaciones de pago por móvil como Alipay y monederos electrónicos de criptomonedas para pagos entre particulares. Los códigos QR pueden vincularse a la tarjeta o a la cuenta bancaria de un cliente, y pueden contener un valor precargado o cargarlo directamente en la cuenta del cliente.
Existen varios tipos de códigos QR:
Mientras que la tecnología que hay detrás de los pagos NFC (comunicación de campo cercano) es más conocida, la que hay detrás de los códigos QR es menos conocida. Para realizar un pago con un código QR, se facilita mediante una tecnología llamada USSD (datos de servicio suplementarios no estructurados).
Cuando se trata de pagos sin contacto, NFC utiliza la comunicación inalámbrica para transferir datos entre dispositivos. Por otro lado, los códigos QR funcionan más como mensajes SMS. En esencia, son paquetes de información comprimidos en esos cuadrados pixelados que escaneas o presentas en el punto de venta.
Los códigos QR pueden contener hasta 182 caracteres y pueden incluir mensajes esenciales y cifrados para facilitar la comunicación entre dispositivos. Al escanear un código QR o presentarlo a un comerciante, la información contenida en el código es procesada por el sistema de pago, y los detalles necesarios de la transacción se comunican entre los dispositivos implicados.
El proceso de pago con tarjeta de crédito mediante código QR puede describirse de varias maneras:
Cuando examinamos los datos, queda claro que los códigos QR han ganado una tracción significativa, sobre todo en determinadas regiones.
En 2019, Alipay, uno de los principales actores en los pagos con código QR, tenía 640 millones de clientes que compraban regularmente a través de dos o más servicios. Junto con su competidor, WeChat Pay, 64% de los compradores chinos utilizaban regularmente códigos QR para realizar pagos. Esto pone de manifiesto la popularidad de este tipo de pago en China.
Alipay también ha ampliado su presencia en Norteamérica, permitiendo pagos QR a través de asociaciones con Nayax y Yuansfer en más de 100.000 puntos de autoservicio.
Incluso el año anterior a la pandemia, el uso de códigos QR en Estados Unidos había experimentado un aumento de 7% en los hogares. Sin embargo, los pagos digitales, en general, están más extendidos en China, donde tendrán una cuota de mercado de 44% en 2020. Aunque la expansión de Alipay a otros mercados es significativa, cabe señalar que se dirige principalmente a grupos demográficos específicos, como los turistas en Europa.
A escala mundial, cuando consideramos específicamente los pagos con código QR, China tiene una cuota significativa con 16,4% gracias a Alipay y WeChat Pay. Sin embargo, no son los líderes dominantes en todo el mundo. Japón rivaliza con el mercado chino con una cuota de 16%, impulsado por marcas como Line Pay. En Oriente Medio, Arabia Saudí tiene una mayor participación con una cuota de 24,2%, gracias a marcas como BayanPay.
Aunque los datos no indican claramente una fuerte presencia de los pagos con códigos QR en los mercados occidentales, es evidente que los códigos QR se han establecido en todo el mundo y se están abriendo paso poco a poco en los grandes mercados occidentales, como Estados Unidos. Sin embargo, el ritmo de adopción sigue siendo una incógnita.
El éxito de los códigos QR en Oriente puede atribuirse al uso mínimo de tarjetas de crédito, que reduce la necesidad de la tecnología NFC, y a la creciente popularidad de las criptomonedas. En Occidente, el auge de los códigos QR se debió principalmente a la preocupación por la higiene y la seguridad durante la pandemia, así como a la atención a los consumidores turísticos.
En última instancia, la comodidad y la inteligencia de los códigos QR en comparación con los métodos de pago existentes determinarán su adopción a largo plazo. A medida que el panorama de los pagos se adapta rápidamente, los códigos QR han surgido como una opción viable, pero aún no se ha aprovechado todo su potencial.
La cuestión de si los pagos QR han llegado para quedarse es interesante, teniendo en cuenta el rápido crecimiento que han experimentado.
Según las previsiones, se espera que los códigos QR representen entre el 10 y el 15% de todos los pagos del mundo en 2023, lo que indica un aumento continuo de su uso. Sin embargo, el ritmo de adopción puede variar según los países.
En general, se prevé que la adopción de los pagos móviles en todo el mundo crezca a una tasa anual compuesta de 27% entre 2020 y 2025. Este crecimiento está respaldado por un informe de McKinsey, que sugiere que, si bien las transacciones tradicionales en puntos de venta pueden disminuir, se espera que aumente el número de pagos sin contacto, incluidos los códigos QR, debido a la sensación de higiene y seguridad percibida.
En Asia, los escáneres de códigos QR se utilizan desde hace años junto con los sistemas de punto de venta. Es probable que esta tendencia continúe, especialmente a medida que aumente la adopción del crédito en otras regiones en las que predominan los códigos QR, como Oriente Próximo. En el mercado occidental, el futuro de la forma de pago dependerá de cuánto valoren los consumidores las ventajas de higiene y seguridad de los pagos sin contacto con QR y de la trayectoria general de adopción de los pagos digitales.
Teniendo en cuenta las previsiones de crecimiento y el uso sostenido en determinadas regiones, parece que los pagos QR tienen una base sólida y es probable que sigan siendo relevantes en el panorama de los pagos.
En lo que respecta a los pagos sin contacto, los códigos QR se han convertido en un actor importante. En 2020, se espera que los pagos digitales realizados por los consumidores superen los 3,2 billones de libras. Dentro de esa impresionante cifra, los códigos QR han hecho una contribución sustancial. En particular, en Oriente, el dominio del mercado se observa a través de actores clave como Alipay y WeChat Pay. Más recientemente, los planes de asociación han ayudado a los códigos QR a ganar impulso también en el mercado occidental.
La adopción generalizada de los códigos QR como método de pago demuestra su eficacia y comodidad tanto para los consumidores como para los comerciantes. A medida que vayan ganando popularidad, cabe esperar que los códigos QR desempeñen un papel cada vez más importante en el mundo de los pagos sin contacto. ¿Quiere saber cómo puede aceptar pagos mediante código QR? Póngase en contacto hoy mismo